lunes, 30 de noviembre de 2009

Y empieza Diciembre.

Hoy he sido demasiado yo y demasiado poco ella. Y esque hoy en día te miran raro por cualquier cosa.
Si dices algo distinto, raro.
Si miras de forma inusual, raro.
Si cambias de rumbo sin motivo, raro.
Así que hoy es uno de esos días raros, pero perfectos para leer todas esas historias desgastadas de un raído cuaderno de bitácora, y regocijarte en el ensimismamiento mágico producido por momentos imperceptibles para la gente normal.Además hoy ha hecho bastante más frío de lo habitual. Algo relativo, ya que seguramente mi concepto de frío cambiará dentro de unos días, con la aurora boreal sobre mi gorro de lana.
Puede que mañana sea yo la ciega. O la normal, como quieras llamarlo. O puede que no.
A veces pasar demasiado tiempo sin cambiar de postura, duele.




jueves, 26 de noviembre de 2009

De buen humor.

Lo siento, lo he intentado, pero por más que escucho a The Killers soy incapaz de entender a toda esa masa formada por cools, pijos alternativos y fans de a pie que los veneran con ropa de colores y gafas diseñadas para llamar la atención. Lo siento pero me niego a ser así. Ahora alguien me soltará el rollito de la tolerancia y lo políticamente correcto, bien, no digo que no respete a sus fans, sólo me metía con unos pocos que todabía creo no han llegado a averiguar quién fue el tipo al que decidieron imitar, esa razón por la que comenzaron a disfrazarse con LSD en el bolsillo unos, y un par de cheques de papá otros.Y me niego a respetar a esa panda de borregos.

martes, 24 de noviembre de 2009

Sencillo placer.

Apoyaste tu cabeza en mi hombro y empezaste a contar preocupaciones de las que yo me reía por lo que tu te enfadabas y me dejabas de dirigir las palabras que no me gustaban, siempre he preferido miradas de reojo mientras te contaba cuentos que te tanto intentabas pedir en tus noches de locura acariciando situaciones sensuales sexuales comicoeróticas sin un manual de instrucciones básicas obvias anecdóticas. Parpadeabas y me hacías cosquillas.

lunes, 23 de noviembre de 2009

Cada día, copia del anterior.

Se acerca Diciembre, y nosotros, atónitos, seguimos mirando al tiempo ladeando la cabeza como quien mira a un indigente salido de la nada, incrédulos, condenándole cruelmente a vagar por el vacío. Sin cruzar palabra nos golpeamos en forma de pensamiento, traducido mediante miradas y gestos invisibles disfrazados de entereza, corriendo entre escalas de grises, inconformistas, rutinarios y aburridos. Realistas. Pero la libertad solo puede ser construida en condiciones de apertura creativa, en ausencia de protocolos y formas, liberación de propiedad, prejuicios y sentimientos de mentira. Aún sueño con alternativas improbables.

domingo, 22 de noviembre de 2009

Andrómaca

Me gusta el caótico desorden en el que vivo, en el que no hace falta esperar al verano para jugar con las olas o adornar de risas un arbol para comer turrón, donde es mejor que la pasión marque el destino, panacea de todos los problemas.
Y no reniego de tardes otoñales que dejan a la luz estigmas de días soleados. No me sirve de nada que un par de ciegos me digan que el amor existe. Lo que realmente quiero es un alma que necesite ser alimentada de caramelo, con las puertas semiabiertas, predicando utopías como un profeta moribundo.

jueves, 19 de noviembre de 2009

Mi lápiz sin punta se queda sin punta

Iba a escribir un montón de metafóras que nadie iba a entender y llevaba ya unas diez líneas cuando me he dado cuenta de que estaba haciendo algo verdaderamente absurdo, por lo que me lo he pensado mejor y he borrado todo mas agusto que un arbusto o que un colibrí, como dice Hanna, mujer a la que le despierta más un portazo que un café. Asi que por unos días dejaré de torturarme y me dedicaré a dejar de pensar en rizar el rizo. Opio!Gracias.

domingo, 15 de noviembre de 2009

Mucha gente

...decide aferrarse al pasado, protegerse de dios sabe qué entre paredes invisibles.

Una vez formaron una habitación, en la que rieron, lloraron, sufrieron y disfrutaron. En la que pelearon y discutieron. Una habitación sin ventanas. Cuando tenían miedo salían y cerraban la puerta, pero no con llave, ya que sino sería imposible volver a entrar. Cambiaban de habitación, recordando la anterior, por lo que inconscientemente pintaban las paredes de esta nueva estancia del mismo color que la anterior, y decían haber aprendido de los errores (¡Inconscientes ilusos!) eso sí, lo demostraban de maneras ridículamente idiotas. Cambiaban los muebles de sitio para no golpearse al entrar, o se calzaban para no resbalar. Idiotas, tirad a la mierda los muebles o poner una puta alfombra.

Días, meses, años más tarde, recordaban ya no una, sino dos habitaciones, jactándose de su experiencia, demostrando Nada disfrazada de sabiduría.

Uno tipo un poco más listo pensó que ya era hora de cambiar, que los problemas no desaparecían, sino que se quedaban encerrados sin llave en esas habitaciones ahora abandonadas. Por lo que tiró una pared, sintiéndose así libre y original. Todos le admiraron y comenzaron a desatar su rabia contenida durante años pagando a martillazos sus errores contra las paredes. El ruido era perfecto, por fin un cambio.

Terminaron cansados. Miraron a los lados viendo sus errores desprotegidos, ahora todos juntos en una gran habitacion llena de recuerdos demasiado materializados. Se veían a si mismos en su pasado. Melancólicos y nostalgicos se compadecían de si mismos, hartos de intentar ser un poco más felices. Nadie les dijo que todo podría haber sido mejor si hubiesen construido ventanas. O simples huecos para dejar un resquicio a la esperanza.

Pero lo triste no era el afanoso y fallido intento por mejorar su situación.
Lo verdaderamente triste, es que nadie les dijo que la solución era mucho más sencilla que sufrir, que llorar, o que recordar un pasado ya inexistente. Nadie les dijo que tenían que haber salido de aquella casa. Deslígate del pasado como si fueses a convertirte en estatua de sal al mirar hacia atrás.

Sois tantos...tantos paralizados por el miedo que os produce el cambio, engañados por la falsa protección de la pared invisible de vuestra habitación sin sentido.

Hoy,domingo.

Cada persona es única pero cada resaca no. Despiertas, bostezas, cambias de postura.Vuelves a hacerlo. Y vuelves a hacerlo otra vez.
Intentas clasificar los datos, en ''sí esto ha pasado'',''esto creo que lo he soñado'',
unos cuantos ''esto no puede haber pasado'' y dos o tres ''esto tenía que haber pasado y no pasó''.

Y encima la sensación de malestar incrementa cuando te levantas de la cama y tu cuerpo no es tu cuerpo sino una especie de alienación extraña producida por el eristoff y el vino malo.
Aun así volveremos a beber. Sí somos así.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Otros meditarían.

Matt, necesito sentir el frío en la cara hasta que el hielo me pinte la nariz de rojo, necesito beber alcohol ardiendo en un jacuzzi de hielo y romper cristales con los codos, quiero que me empaches a sólidos hasta que se me olvide el tamaño de mi cuerpo, necesito ver la perplejidad en los rostros de los cuerdos, no me necesito a mi, ni a ti, quiero volar, escapar, gritar, viajar a otra época en la que me delaten los pinchazos. Chillo, me quedo sin voz.
Lárgate de aquí, pero fotografíanos. Sólo quiero que un trozo raído de papel sea nuestro refugio contra el olvido.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

ya no se qué contarte

que no te halla besado ya...

martes, 3 de noviembre de 2009

Guardare esta época

con bastante cariño a pesar de que me recuerda a una antigua película del oeste en el que los buenos siempre están borrachos y gordos y el caballo de malo va siempre mucho más rapido.

Harta de victimismos y de personálidades débiles, que no frágiles. Nadie va a rescatarte, llámame cruel, pero yo tampoco. No te haría nigún favor.
Cansada de plagios y de sutilezas, de protocolos y de hipócrita educación. Miénteme sin ganas, pero miénteme a la cara.
Aun así la guardaré con mucho cariño, ya que, aunque mi bici ha quedado completamente destrozada, ahora se ir corriendo al colegio. Y hasta este momento no me había dado cuenta de que se llega mucho más rapido.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Empieza otro Noviembre más.

Es imposible educar a una lágrima repitiéndole que se quede en su ventana, mirando a través de un cristal siempre empañado. Intentar explicarle que no va a encontrarte aunque salga a buscarte, que tarde o temprano morirá, y ya no en tu mano, sino en el frío suelo. A veces, incluso dejando una marca. Pero últimamente siempre llueve, asi que ni siquiera dejará cicatriz alguna. Se camuflará con la misma lluvia bajo la que te gustaba mojarte. Ese complemento perfecto para tus tardes de domingo mirando el techo sin pintar de tu pequeña habitación. Su destino es morir lentamente, dejando un rastro de tristeza incolora. Falling slowly.
Alguien dijo que las lágrimas no huelen a nada. Es mentira. Huelen a tí.

Una vez...

Huyamos, ¿quieres?